
El cheesecake, conocido también como pastel de queso, es un postre clásico de la cocina americana. Popular en todo el mundo, su principal ingrediente es el queso crema. Su fondo es crujiente y se obtiene al moler o triturar galletas y mezclarlas con mantequilla y azúcar acompañado de una decoración con frutos rojos y fresas frescas. Un postre crujiente e irresistible.